mayo 31, 2008

UNTERM RAD

Bajo la rueda se muele el trigo
del cual comemos sin sentido
venga otro viento y otro ritmo
que nos aparte de este sitio.
Será mania o será opción
calificado fanatismo
en este estado se aconseja llevar
la dignidad en un bolsillo.
Un huracán con nombre humano
pido para el crimen impune
justicia altamente destructiva
tu no me olvides memoria colectiva.
Viene la vieja y la nueva represión
la delincuencia de los bancos y los medios
no estamos viendo lo que queremos ver
bajo la rueda seguimos repitiendo.
En una piedra escribo por favor
luego la encierro en el puño
camino recto hacia el torpe tribunal
y que mi mano juzgue al futuro.
Incomunicate móvil satelital
conozco uno más moderno
bajo la rueda en la aldea global
perdemos uñas, dientes y pelo.

PÁNICO

Cruzo la calle Amunátegui en rojo
y choco de cabeza con un carro pardo
el rojo ahora cubre
la calle que era negra
y el carro veloz sigue sin sonrojar.
Salta un zapato al aire gris
y los documentos quedan en blanco
mientras un hombre café los mira
y rie con dientes amarillos
el semáforo vuelve a verde
y me quedo blanco
y luego azul.

HERIDAS DE GUERRA

Buscando una piedra
que oculte una moneda
para comprar vino y pan.
Buscando una esquina
no muy sombría
para echar
los huesos y recordar.
Que tuve familia
que también fuí niño
que tuve un nombre
que ya lo he perdido.
Y el invierno florece
en mis manos abiertas
Heridas de Guerra
Heridas de Guerra.
Se abre la calle recojo el cartón
me siguen los perros que la noche dejo
con tres dedos de frente podrás discernir
que nadie elige una vida así
nunca así.

EL TRAMPERO

Vienen por la huella
cuatro perros en los huesos
pese a la fatiga del camino
vienen fuertes, decididos
no hay quien interrumpa la carrera
ni los buhos ni la niebla
los espinos encorvados sólo observan
en silencio, ya se acerca.
Vino una tarde oscurecida
el trampero con sus fierros
por cada diez metros una marca
y una seña, con su cebo
ya se ha criado el hombre solo
con la muerte como juego
no produce nada dentro, un grito
un aullido, buena suerte.
Cae el animal la trampa quebra el hueso
aquí no hay pelaje y nadie come perros
apura el trampero bajando la escopeta
no piensa en ninguna y revienta a la bestia.
Crimen y castigo leyeron sus hermanos
el camino rumorea un crimen ignorado
la brisa cruza el monte y por el monte vienen
los ecos de cobranza naturaleza sabia.
Páramo abajo atajan al trampero
comillos en las piernas, las fauces en el cuello
animal y hombre revuelcan en el suelo
cae enredado un cuerpo y sus fierros.

mayo 12, 2008

SALUD DE POBRE

Partio haciá allá el pobre a ver a su enfermo
largo el camino que hay que recorrer
se abren las rejas igual que en la cárcel
de dos en dos adentro apúrese.
Quince más quince siempre suman treinta
ya no hay no más tiempo para conversar
el pobre se queda solo en su cama
cama que el doctor no visitará.
Recuerdo al viejo y su salud de fierro
con hierbas siempre a mi me sano
cayó en pocilga de sepulturero
salud de pobre fue quien lo mató.
Hombres de blanco con el alma negra
el dinero al perro hace bailar
donde la ética esta la conciencia
la muerte un día también cobrará.
Así aprieta el pecho esta pena
el camino de vuelta parece alargar
cierran las rejas igual que en la cárcel
el pobre se aleja del hospital.

mayo 05, 2008

ASESINOS DE CABEZA GACHA

El asesino de cabeza gacha
encoge hombros y finge locura
el asesino no tiene miedo
el que juzga también lo oculta
al asesino le dan los años
hospitalario y empastillados
y a la víctima le dan la espalda
primera plana olvidada.
El gran jurado se queda quieto
otro asesino que va al hotel
yo te prometo que no te olvido
en cuanto salga voy a comer.
Ser asesino de asesinos
buena ocurrencia parece ser
si la justicia inoperante
solo nos queda proceder.
El asesino de cabeza gacha
es un cobarde naturaleza
poco serían un par de balas
tu indiferencia la que progresa.
Los asesinos de mujeres
miran fijo a la cámara
en absurda mea culpa
su existencia nos amenaza.

VIEJA ESCUELA

Ya no está ahí, le veo pisando barro y acarreando fierro ya no esta ahí, a dos grados bajo cero y a cuarenta bajo el sol, acarrea fierro. Nadie le reconoce y a nadie reconocerá no esta ahí y nada podría extrañar serán aún peor en diez años más la verdad, ya no esta ahí y le veo paciente, esperando el accidente que nos desaparecerá no esta ahí y no quiere oir lo que escuchó años atrás entre pares y tríos siempre repetitivos lo bueno acabó pronto y el resto antologías ya no esta ahí y el peso de los años se fue con él.